Lugares en los que convergen la riqueza artesanal y gastronómica de la entidad, donde se pueden apreciar y adquirir los productos que se cultivan en esta tierra, son los mercados tradicionales de Oaxaca.
Espacios de comercio que prevalecen desde la época prehispánica para el intercambio comercial, constituyen parte fundamental de la economía de muchas familias oaxaqueñas y contribuyen al desarrollo cultural de las comunidades.
Recorrerlos es hacer un viaje entre las maravillas culturales de las ocho regiones de Oaxaca, además de experimentar el cálido recibimiento de las y los locatarios que dan vida a estos espacios.
Desde mezcal, café, textiles y arte popular elaborado con barro, hojalata, fibras naturales y otras materias primas. Un sinfín de colores, aromas y sabores que conquistan los sentidos de las y los visitantes; exquisita gastronomía, y más.
De acuerdo con los registros históricos del Archivo General del Estado de Oaxaca, estos espacios públicos funcionaron como puestos de tianguis y fue en el Porfiriato que se comenzaron a edificar los mercados en los diferentes barrios de la ciudad de Oaxaca.
El mercado más antiguo de la ciudad se encontraba en la Plaza de Armas, hoy conocida como Alameda de León, esto durante la primera mitad del siglo XIX. Posteriormente fue reubicado en la Plaza de San Juan de Dios e inició su construcción en 1893. En 1894 inaugurado como mercado “Porfirio Díaz” y en 1912 cambió de nombre a “Benito Juárez Maza”.
Existen otros mercados históricos como el popularmente conocido como mercado de La Merced; es el mercado “Democracia” que se estableció de manera provisional a principios del año 1861 hasta 1908; también el más grande de la Ciudad de Oaxaca, la Central de Abastos que se encuentra en servicio desde 1978.
Además de estos centros, en las diferentes comunidades, principalmente de la región de los Valles Centrales, se encuentran los “días de plaza”, en las calles de la población se instalan comerciantes que llegan de distintas poblaciones a expender sus artesanías, frutas, verduras, comida tradicional y bebidas tradicionales.
Estos días dependen de la población en la que se realicen; por mencionar algunos, en Tlacolula de Matamoros es el día domingo, uno de los “días de plaza” más grandes y concurridos del estado, donde aún subsiste el trueque. Los lunes en Miahuatlán de Porfirio Díaz, ubicado en la Sierra Sur, o en San Pedro Pochutla en la región de la Costa.
Los días martes en Ayoquezco de Aldama, en Zimatlán de Álvarez los miércoles, en la Villa de Zaachila, son los días jueves, San Antonino Castillo Velasco y Ocotlán de Morelos los días viernes, y el sábado en Tlaxiaco, en la Mixteca.
